La etapa III, recorrida el 12 de junio, finalizará en Portomarín.
Hoy el horario se ha normalizado; el grupo ha madrugado a las 6 h de la mañana; el cansancio ha hecha esta despertada. El ambiente seguía húmedo y con lluvia muy fina. A esa hora el reguero de peregrinos ya es palpable.
Como llueve el desayuno se sirve en el albergue con la variedad de cosas y reclamos culinarios que nos tiene acostumbrados la organización.
Terminado el desayuno, cargados con la mochila, viene el momento interior de oración y motivación del día.
Calentamos un poco y cantamos ¡decidí ser Peregrino! La ruta ha sido intensa y muy bonita con el tremendo descenso al río Miño hasta llegar a Porto Marin. Una ciudad maravillosa con el Miño al fondo y su iglesia torreón. Hoy nos ha tocado dividirnos en dos albergues distintos y la cena ha sido en plena calle del pueblo a base de de un bufete libre y ante la envidia de todos los transeúntes
Redacción: Rosendo Soler, director titular de Salesianos-Alicante