Han sido años de espera, de larga e intensa preparación
Pocas cosas se han realizado con tales preparativos. Desde los tres añitos estos candidatos al sacramento han escuchado expresiones, celebrado acontecimientos, contemplado a otros candidatos como éste; de tres a diez años se han visto inmersos en un clima propicio a esta su primera comunión.
Estos últimos años se han profundizado los signos, la preparación, las actitudes internas, se les han hecho familiares otras personas, que les han acompañado muy de cerca, clarificando e intensificando el gesto sacramental, haciendo consciente la celebración.
La Comunidad cristiana abre sus puertas a estos niños y niñas al sentir que «se han preparado «suficientemente», si bien el recorrido del gesto emprendido no ha hecho más que empezar.
Aún seguirán en un ambiente propicio al crecimiento en armonía, reaccionando a los cambios sin excesivas sorpresas y sobresaltos, compaginando mente y corazón.
¡Bienvenidos, amigos y amigas, a esta comunidad que os recibe con alegría como hermanos en Jesús! ¡Y feliz fiesta en familia!
Juan Pérez González
Salesiano