La situación gravosa de la pandemia no ha impedido ese habitual gesto con el que dar comienzo a la Cuaresma cristiana.
Ayer los alumnos y alumnas de 5 años de Educación Infantil han asistido a su primera celebración del «miércoles de ceniza».
Durante los días previos a esta fecha, los niños y niñas han ido anotando los aspectos que se comprometían a hacer bien durante este tiempo que llamamos cuaresma.
La ceniza, obtenida al quemar esos pequeños papeles ha servido para espolvorearla, como símbolo, sobre sus cabezas. Hacer las cosas bien y abandonar las cosas malas ha sido la intención de todos estos gestos.
Esta ceremonia no ha sido única en el colegio; todos los grupos, hasta el 2º curso de bachillerato, lo han realizado en formas diferentes; la han realizado sus tutores.
Redacción: Beatriz Sánchez Escolano: profesora de Ed. Infantil